Ermita de D'Annunzio

Coordenadas: 42°29' N - 14°46' E

La Ermita D'Annunzio (también llamada Ermita de San Vito) es una masía (utilizada como ermita) construida sobre un promontorio ubicado en el distrito de Portelle en San Vito Chietino, donde residió Gabriele d'Annunzio en el verano de 1889. La zona, así como el propio promontorio y la costa debajo, se llama promontorio D'Annunzio. No muy lejos se puede visitar el Trabocco Turchino y la playa del mismo nombre. En esta residencia permaneció el poeta de Pescara del 23 de julio al 22 de septiembre de 1889 junto con su amante Bárbara Leoni (apodada la "bella romana"). Aquí encontró inspiración y escenario para El triunfo de la muerte, la última de la llamada trilogía del Romance de la rosa después del placer y la inocencia. En el texto, es al pie del promontorio donde pierden la vida los protagonistas de la novela.

Abadía de San Giovanni en Venere

Coordenadas: 42°15' N - 14°29' E

La Abadía de San Giovanni in Venere está situada en la localidad de Fossacesia, sobre una colina que domina el mar Adriático a 107 m (sobre el nivel del mar). El complejo monástico de San Giovanni in Venere consta de una basílica y un monasterio cercano, ambos construidos a principios del siglo XIII en lugar del pequeño monasterio preexistente. La ubicación es muy pintoresca: está en una colina que domina la costa cercana durante varios kilómetros al norte y al sur. Desde diciembre de 2014, el sitio está gestionado por el Complejo de Museos de Abruzzo.

Trabocco Turchino

Coordenadas: 42°30' N - 14°45' E

El Trabocco de Punta Turchino es uno de los más bellos de la costa de San Vito, ubicado en Portelle y toma su nombre de su posición, de hecho se encuentra en un pequeño saliente de la costa llamado promontorio de Cabo Turchino. Está construido íntegramente sobre empalizadas de madera sin cimentación pero fijadas en equilibrio, en ocasiones con tendido de cables y fijación de pilotes a la roca. A través de un camino sobre tablas de madera desde la orilla se llega al cobertizo de pesca y a la plataforma desde la que, mediante un complejo sistema de tirantes y balancines, es posible sumergir y retirar las redes de pesca. Se trata del famoso trabocco del que habla D'Annunzio en su "Triunfo de la Muerte", y así describe el Vate "... en el extremo del promontorio derecho, sobre un grupo de rocas, se extiende un Trabocco, una extraña máquina de pescar, toda compuesta de tablas y vigas, parecida a una araña colosal...".

Belvedere "Guglielmo Marconi"

Coordenadas: 42°30' N - 14°44' E

La terraza más bonita del Adriático, de un vistazo el mar y la Majella y al fondo el Gran Sasso. El paseo que conduce al Belvedere serpentea entre las flores y los colores de la parte antigua del país. No representa un lugar sino una sugerencia de un suave roce del horizonte entre el cielo y el mar, transportado por la brisa que viene de las montañas.

Paseo marítimo "di Gualdo"

Coordenadas: 42°31' N - 14°44' E

El paseo marítimo no tiene más de 300 metros de largo y hay dos trabocchi/restaurantes. Es un paseo muy agradable muy recomendable al atardecer. La calle es peatonal y hay diversos restaurantes donde disfrutar de comida local. Durante el verano, hay entretenimiento nocturno y un mercadillo. Algunos columpios y toboganes para niños son lugares donde la playa se encuentra con la acera. Durante el día también se puede disfrutar del largo mar/playa, es una zona de arena con aguas poco profundas y apta para niños.

El milagro eucarístico de Lanciano

Coordenadas: 42°23' N - 14°39' E

Las reliquias del milagro eucarístico. El milagro eucarístico de Lanciano habría ocurrido en la pequeña ciudad de Lanciano en la primera mitad del siglo VIII: mientras un sacerdote celebraba, en el momento de la consagración, la hostia y el vino se transformarían en carne y sangre. Las reliquias del fenómeno, el más conocido de su tipo, se conservan en el interior de la iglesia de San Francisco, en el histórico barrio de Borgo.

Zoológico de Abruzos

Coordenadas: 42° 27' N - 14° 44' E

El Zoológico de Abruzzo es una exposición permanente de vida silvestre con un sendero peatonal que ofrece a adultos y niños la oportunidad de vivir un día en estrecho contacto con animales de todo el mundo. Se trata de una empresa familiar que nació hace unos años como un simple experimento, que hoy se vale de un equipo científico compuesto por dos veterinarios, un auxiliar veterinario y un etiólogo, para solucionar los problemas que surgen a diario y garantizar la salud y el bienestar de la especie huésped. Gracias a las actividades educativas propuestas es posible investigar cuestiones relativas a la protección y conservación de especies amenazadas y obtener información o aclaración sobre las dudas que puedan surgir. El Zoológico de Abruzzo también cuenta con un miniparque, un bar y un restaurante de autoservicio para los visitantes.

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